miércoles, 31 de diciembre de 2014

ULTIMO DIA DE UN BUEN AÑO

  Despedimos el año. El balance...muy  bueno. No voy a decir inmejorable, porque nos habría gustado pasar las navidades "en casa" con nuestra familia y amigos, pero por lo demás, perfecto. Teníamos un sueño que nos rondaba por la cabeza,  nos decidimos a ponerlo en marcha y aquí estamos. Los tres meses de adaptación en este nuevo país los incluímos también como "muy buenos" pues todo ha ido rodado, aunque sin duda no ha sido fácil y nuestro estado de ánimo ha tenido sus altibajos, pero era lo menos que podíamos esperar.
  Para terminar el año  un par de bueno baños de los chicos, uno por la mañana y otro por la tarde. Salen muy contentos.




A mediodía un paseo por Bundoran, unos sandwiches, y a comprar las uvas para preparar la noche.

   A las 8 habíamos reservado la cena en un pub muy típico de aquí y que nos gusta frecuentar esta semana por el buen ambiente que tiene. Antes de cenar, es tradición en nuestra familia, como en casi todas las vuestras, hacer una ronda de "vinos" para brindar por el año que despedimos y el que recibimos, así que a las 7 ya estábamos por ahí los cinco, pero sin vino...nosotros con unas pintas y los niños con unas fantas.

  8 de las tarde, llegamos al Maddenbridge bar donde nos está esperando nuestra mesa. El pub lleno de gente cenando, música en directo, muy buen ambiente. Nuestra cena de nochevieja no se parece en nada a la de España, pero sí a la típica comida de pub: un fish and chip, un tajine de cordero, unas fajitas, hamburguesas y bien de patatas fritas. Eso si, todo muy elaborado y bueniiiiisimo.




A las 10:30 de la noche el pub está ya lleno, llenísimo de gente con muchas ganas de fiesta. Está muy divertido pero el ambiente empieza a ser "de dos rombos", y además ya vamos un poco contra reloj para comer las uvas en casa a ritmo de las campanadas de la puerta del sol. 10:45, todos listos delante del portátil y la chimenea viendo a Ramón García y Anne Igartiburu...cinco vasos con 12 uvas, 12 campanadas, 12 deseos uno con cada trago, para cada uno de los 12 meses del año. Entre estos deseos, seguro, uno en común en los cinco: dar un fuerte abrazo bien pronto a nuestra familia y amigos. Cinco sonrisas con cinco besos y abrazos para empezar bien el año, en un lugar lejano en el norte, muy al norte de Irlanda, desde donde os deseamos FELIZ AÑO NUEVO.


No hay comentarios:

Publicar un comentario